¿Qué es la QCS?
La queratoconjuntivitis seca es una patología del sistema lagrimal, más común en perros. Esta resulta en una inadecuada cantidad o calidad de lágrima. La parte acuosa de la lágrima es producida por la glándula lagrimal principal y la glándula lagrimal de la membrana nictitante. La lágrima es necesaria para proveer una adecuada lubricación y nutrición a la córnea.
¿Qué causa la QCS?
La causa más común de queratoconjuntivitis seca en perros es un trastorno autoinmune de las glándulas lagrimales anula la función secretora de las mismas. Otras de las causas son:
– Enfermedades infecciosas (virus de distemper canino “moquillo canino”).
– Enfermedades endocrinas (hipotiroidismo, diabetes mellitus, hiperadrenocorticismo).
– Toxicidad de fármacos (Derivados de sulfas, atropina).
– Prolapso o remoción de la glándula lagrimal del tercer párpado.
Ciertas razas tienen una mayor predisposición a desarrollar la queratoconjuntivitis seca, entre las cuales resaltan en Latinoamérica; Bulldog Inglés, Shih tzu, Lhasa Apso, Pug. Sin embargo, independientemente de la raza cualquier perro puede padecer queratoconjuntivitis seca.
¿Qué signos clínicos se presentan en QCS?
Los signos clínicos más comunes incluyen dolor, ojos rojos (hiperemia conjuntival bulbar), secreción mucopurulenta en etapas más avanzadas y se puede presentar de manera unilateral o bilateral. Secundario al ojo seco se pueden desarrollar úlceras corneales, pigmentación y vascularización corneal que pueden conducir a un déficit visual.
¿Cómo se diagnostica la QCS?
Los signos clínicos y predisposición racial dan una orientación al diagnóstico. La QCS cuantitativa se confirma mediante el test de Schirmer, el cual es un papel filtro que cuantifica la producción lagrimal. Siendo un valor normal de 15 a 20 mm por minuto. Si la mascota tiene una producción lagrimal normal pero signos clínicos de queratoconjuntivitis seca, es necesario realizar un test de ruptura de lágrima para evaluar su calidad.
Tratamiento de QCS
El tratamiento depende de la causa de la QCS, si es endocrina o infecciosa es necesario tratar la etiología primaria. En la QCS autoinmune, el tratamiento es administración tópica de por vida de medicamentos que estimulan la producción lagrimal y reducen la inflamación. Son administrados de 2 a 3 veces al día, la dosis específica será prescrita por su oftalmólogo veterinario.